jueves, 27 de mayo de 2010

uso inadecuado de los antibióticos




Una mala indicación o elección del antibiótico, o un mal cumplimiento de la prescripción, puede provocar:



1. Ineficacia terapéutica



2. Desarrollo de resistencias bacterianas: se eliminan o inactivan los microorganismos más sensibles al antibiótico, mientras persisten y se multiplican los resistentes.



3. Enmascaramiento de procesos infecciosos importantes: se disminuye la sintomatología pero no se cura la enfermedad; además, ésta será luego difícil de diagnosticar por métodos microbiológicos ya que los cultivos pueden resultar negativos pese a estar en presencia de una infección susceptible de haber sido comprobada.




4. Cronificación: la falta de erradicación de un número suficiente de bacterias dará lugar a la persistencia de algunas que mantienen su grado de patogenicidad sin ocasionar manifestaciones agudas.



5. Recidiva: las cepas supervivientes, sean resistentes o sensibles, inician una nueva proliferación que provocará una recaída o una reinfección. 6. Efectos adversos debidos a la acción del medicamento (independientes de que éste sea o no eficaz). La toxicidad de algunos antibióticos es potencialmente grave y su aparición resulta inaceptable si el paciente no necesitaba el fármaco. Por otra parte, todo antimicrobiano ocasiona la eliminación de las bacterias sensibles al mismo, dejando un vacío ecológico que es llenado por la proliferación de microorganismos no susceptibles; esto puede repercutir negativamente en la capacidad defensiva que tiene la flora endógena normal y, además, puede suceder que los nuevos gérmenes sean patógenos para el paciente

miércoles, 26 de mayo de 2010

uso de los antibióticos



El uso racional de antibióticos tiene como objetivo obtener el mayor beneficio para el enfermo, limitar el desarrollo de microorganismos resistentes y minimizar los gastos económicos.
En la difícil tarea de seleccionar un plan antibiótico, además de considerar los factores que se relacionan con el enfermo y su enfermedad, es necesario conocer las propiedades de las drogas.
Esto último nos llevó a emprender la tarea de considerar las características de los antibióticos agrupados en sus diferentes familias.
De cada una de ellas se analiza: su mecanismo de acción, el espectro de actividad, los mecanismos de resistencia, la farmacodinamia, la farmacocinética, los efectos adversos y eventuales riesgos tóxicos; de donde se concluyen sus indicaciones clínicas más apropiadas y la adaptación de las dosis en los casos de disfunción renal o hepática.
La importancia que tiene difundir la información acerca del uso adecuado de los antibióticos es el de buscar los mejores resultados, con el mínimo de efectos adversos y tóxicos, empleando planes más sencillos y menos costosos. Cuando los antibióticos se emplean adecuadamente se consigue además un retardo en la emergencia de cepas resistentes.
No solo en nuestro país, sino que en el mundo entero hay un uso excesivo de antibióticos. Se los emplea en enfermedades no infecciosas, en enfermedades virales, cuando se aislan gérmenes contaminantes que no están ocasionando enfermedad, ante la presencia de anticuerpos séricos pero en ausencia de actividad infecciosa, con el fin de hacer profilaxis sin haber indicación de hacerlo, porque el enfermo o la familia lo exige, como antipirético sin existir un diagnóstico certero de enfermedad infecciosa.
La prescripción no adecuada y abusiva de los antibióticos, la prolongación de los planes más alla de lo necesario, la aplicación de dosis subóptimas, la irregularidad en la toma de las drogas, son los principales factores que han llevado a que hoy la tasa de resistencia sea tan elevada.
Cuando se usa un antibiótico, especialmente si es de amplio espectro, hay que pensar en el cambio ecológico que va a sufrir la microflora normal de la persona. Esta microflora humana, orofaringea y gastrointestinal, se relaciona simbióticamente con el organismo y cumple una función de defensa contra la invasión de gérmenes potencialmente patógenos. Con la exposición a agentes antimicrobianos la flora normal se altera, lo que favorece las sobreinfecciones por bacterias patógenas resistentes y hongos. La vía de administración y las características farmacocinéticas de la droga, son otros factores que condicionan el cambio de ese ecosistema. Estos conceptos conduce a la necesidad de ser prudentes en la indicación de los antibióticos y en el tiempo de duración de las terapéuticas.


No todos han tomado la suficiente conciencia del grave problema que significa el aumento cada vez mayor de la tasa de microorganismos resistentes a múltiples antibióticos. Esto nos está conduciendo a épocas preantibióticas, en que se estaba desvalido frente a las enfermedades infecciosas y por tanto la morbimortalidad por esta causa era muy elevada.

jueves, 20 de mayo de 2010

Descubrimiento de los antibióticos, Alexander Fleming.


Alexander Fleming (1881-1955) Científico escocés, que consiguió la justa fama al descubrir lo que ha salvado a millones de personas de sus enfermedades, fue la enzima antimicrobiana llamada lisozima y el primer antibiótico: LA Penicilina. Obtenido a partir del hongo Penicillium,
Si bien se sabe que la educación de Alexander fue bastante rudimentaria, el científico comenzó a sentir amor pleno por la observación detallada y el talante sencillo. Una vez cumplidos los 13 años, se trasladó con uno de sus hermanastros a Londres, en donde finalizó su educación gracias a dos cursos intensivos realizados en el “Polytechnic Institute” de Regent Street.
En 1901 obtuvo una beca para trabajar en el St. Mary’s Hospital Medical Schoolde Paddington, en donde estuvo toda su vida. Cinco años después de su ingreso, Fleming comenzó a trabajar para el equipo del bacteriólogo Sir Almroth Wright, con quien fue socio por más de 40 años. En el año 1908 terminó su carrera, obteniendo la Medalla de Oro de la Universidad de Londres.Fleming dedicó su vida profesional enteramente a la investigación de las defensas del cuerpo humano, en lucha con las distintas infecciones bacterianas.
Trabajó como médico microbiólogo en el Hospital St. Mary de Londres hasta el comienzo de la Primera Guerra Mundial. En este hospital trabajó en el Departamento de Inoculaciones dedicado a la mejora y fabricación de vacunas y sueros. Almorth Edward Wright, secretario del Departamento, despertó el interés de Fleming por nuevos tratamientos para las infecciones.
Durante la guerra fue médico militar en los frentes de Francia y quedó impresionado por la gran mortalidad causada por las heridas de metralla infectadas en los hospitales de campaña. Finalizada la guerra, regresó al Hospital St. Mary donde buscó intensamente un nuevo antiséptico que evitase la dura agonía provocada por las heridas infectadas.
La lisozima descubierta por Fleming, también llamada muramidasa, es una enzima, que daña las células de las bacterias. La lisozima es abundante en numerosas secreciones como la saliva, las lágrimas y el moco y está presente en el bazo, los pulmones, los leucocitos, el plasma, la leche y el cartílago., donde actúa como una barrera frente a las infecciones.
El laboratorio de Fleming estaba habitualmente desordenado, lo que resultó una ventaja para su siguiente descubrimiento. En Septiembre del 1928, estaba realizando varios experimentos en su laboratorio y al inspeccionar sus cultivos antes de destruirlos notó que la colonia de un hongo había crecido espontáneamente, como un contaminante, en una de las placas con estafilococos, observó que las colonias bacterianas que se encontraban alrededor del hongo (más tarde identificado como Penicillium notatum) eran transparentes debido a una lisis bacteriana. La Penicillium es un moho que produce una sustancia natural con efectos antibacterianos: la penicilina. La lisis significaba la muerte de las bacterias, y en su caso, la de las bacterias patógenas (Staphylococcus aureus) crecidas en la placa. Aunque él reconoció inmediatamente la trascendencia de este hallazgo sus colegas lo subestimaron. Fleming comunicó su descubrimiento sobre la penicilina en el British Journal of Experimental Pathology en 1929. En septiembre de 1928, Alexander Flemingdescubrió la penicilina, siendo considerado actualmente como uno de los más importantes descubrimientos de la terapéutica moderna.
Fleming trabajó con el hongo durante un tiempo pero la obtención y purificación de la penicilina a partir de los cultivos de Penicillium notatum resultaron difíciles y más apropiados para los químicos. Los químicos norteamericanos Boris Chain y Howard Walter Florey, desarrollaron un método de purificación de la penicilina que permitió su síntesis y distribución comercial para el resto de la población.
Durante un estudio del doctor acerca de las mutaciones de determinadas colonias de estafilococos, encontró interesante el hecho de que uno de los cultivos había sido accidentalmente contaminado por un hongo identificado como el Penicillium notatum.Luego de observar con detenimiento el comportamiento del cultivo, comprobó que los estafilococos que se ubicaban en la zona inicial de contaminación se habían vuelto transparentes por efecto de una sustancia antibacteriana segregada por el hongo.En ese momento, comprobó que una muestra de cultivo puro del hongo adquiría un alto nivel de actividad antibacteriana y era inofensivo para el cuerpo animal.
La aportación científica de Fleming es doble pues además de descubrir la penicilina también encontró lisozima con actividad antibiótica. Fleming puede ser considerado como el primero en descubrir una enzima antimicrobiana. Los dos descubrimientos de Fleming ocurrieron en los años veinte y aunque fueron accidentales demuestran la gran capacidad de observación e intuición de este médico escocés. El descubrimiento de la lisozima ocurrió después de que un moco de su nariz procedente de un estornudo, cayese sobre una placa con bacterias para el control y estudio microscópico. Días más tarde advirtió que notó que las bacterias habían sido destruidas en el lugar donde se había depositado el fluido nasal.
Fleming no patentó su descubrimiento para que fuera más fácil la difusión de un antibiótico necesario para el tratamiento de las numerosas infecciones que azotaban a la población. Por sus descubrimientos, Fleming compartió el Premio Nobel de Medicina en 1945 junto a Ernst Boris Chain y Howard Walter Florey. .


http://www.youtube.com/watch?v=8BJwxZIzx0Q

miércoles, 19 de mayo de 2010

Algo de historia...


El mecanismo de acción de los antibióticos no ha sido conocido de forma científica hasta el siglo XX; sin embargo, la utilización de compuestos orgánicos en el tratamiento de la infección se conoce desde la antigüedad. Los extractos de ciertas plantas medicinales se han utilizado durante siglos, y también existe evidencia de la utilización de los hongos que crecen en ciertos quesos para el tratamiento tópico de las infecciones.

Antes de los antibióticos

Egipto: existen escritos antiguos acerca de medicamentos que se encuentran en los papiros egipcios. El papiro de Eberg contiene datos de recetas y fórmulas que abarcan un gran número de estos materiales. Ejemplo: aceite de ricino, menta, opio, aloe (sábila). Utilizaban muchos minerales tales como hierro, sulfato de cobre, magnesio y piedras preciosas pulverizadas finamente. Entre los productos animales se encontraban sangre de lagartijos, dientes de cerdo, grasa y excreta de animales. Se piensa que los egipcios utilizaban el jugo de la adormidera (opio) y la marihuana para adormecer a los pacientes antes de operaciones quirúrgicas.












Otras Regiones: en el nuevo mundo las diversas tribus tenían sus curanderos que se valían de encantamientos y hierbas para curar enfermedades.
Al igual que en otros pueblos su medicina era una mezcla de religión, misticismo, superstición y conocimiento de las propiedades medicinales de distintas sustancias.
- América del Sur: Incas utilizaban quinina contra el paludismo (malaria) y la cocaína (extraída de la coca) para aliviar fatiga y como anestésico.
- Indios del Brasil empleaban Ipecacuana contra la disentería amebiana (infección causada por parásito ameba)
- Indios americanos: sabían de la cáscara sagrada como laxante (hoy aún se utiliza)


Grecia y Roma:Esculapio, Dios de la medicina - Hipócrates: Padre de la medicina
El paciente era tratado con oraciones y sacrificios, limpieza con baños minerales y limpieza interna con catarsis. Utilizaban masajes, fricciones, ingestión de vinos medicinales para inducir sueño. Si los tratamientos tenían éxito llevaban datos de los mismos y los ponían a la disposición de quién los deseara utilizar. En esta forma se reunió un grupo considerable de conocimientos. (NATURALISTAS)
Hipócrates negaba el origen sobrenatural de la enfermedad. Pensó que la naturaleza tenía el poder de curar y que el médico podía ayudar por medio de la luz solar, dieta, baños, masajes y fármacos. En sus escritos mencionó más de 400 fármacos, aunque sólo utilizó un número pequeño de ellos. Entre sus preparados se encontraban emplastos, supositorios, píldoras, pomadas, gargarismos.
Dioscorides médico griego, escribió un tratado de medicina donde descríbe muchos fármacos aún en uso como el opio, arsénico y el helecho macho. Algunos de las 600 substancias que enumeró aún se encuentran en la farmacopea de nuestros días.
Galeno, médico griego estableció un sistema de medicina y farmacia que lo convirtio en una autoridad suprema por cientos de años. Sostenía Galeno que los fármacos debían de utilizarse para antagonizar los síntomas de la enfermedad.

Edad Media Baja: prácticas de los médicos griegos fueron conservadas. Eran mayormente los monjes de los monasterios benedictinos los que utilizaban las hierbas naturales cultivadas en su monasterio además de reposo, buena alimentación y tratamiento espiritual.


Época Medieval: para esta época los árabes dominaban Asia Menor, África y llegaron hasta España. Aunque absorbieron parte de la medicina de Hipócrates y Galeno, durante los 500 años de su supremacía hicieron avanzar en muchas formas la medicina y la farmacia. Los árabes no solo contribuyeron con muchas nuevas plantas, sino también hicieron estudios importantísimos sobre la composición química de los medicamentos. Los árabes compilaron la primera farmacopea y se considera que fueron los primeros en separar la farmacia de otras artes médicas.
Renacimiento: (1493-1541) Paracelso médico suizo Introdujo diversos remedios nuevos. Ej. Azufre y compuestos de mercurio para tratar sífilis. En esta época se elaboraron varios farmacopeas en Nurenberg, Alemania (1546) y Londres (1618). La primera publicada a escala nacional (1818) se conoció como Códice Francés. En 1820 apareció la de Estados Unidos. Algunos fármacos de esa época incluyen tintura de opio, sales de magnesio y ácido bórico.



Siglo XVIII: el médico inglés Edward Jenner (1749-1823) desarrolló el método de vacunación para prevenir la viruela. En 1779 murieron en Inglaterra 15,000 personas por viruela y en el 1823, 44 años después de haberse elaborado eficazmente la vacuna sólo murieron 37.Obviamente este es el comienzo de la erradicación de muchas enfermedades por vacunación.













jueves, 6 de mayo de 2010

¿que es un antibiotico?


Un antibiótico es una sustancia química producida por un ser vivo o derivada sintética de ella que a bajas concentraciones mata o impide el crecimiento de ciertas clases de microorganismos sensibles que por su efecto, se utiliza en medicina humana u animal u para tratar una infección provocada por dichos gérmenes. Normalmente un antibiótico es un agente inofensivo para el huésped, aunque ocasionalmente puede producirse una reacción adversa al medicamento o puede afectar a la flora bacteriana normal del organismo. Se espera que la toxicidad de los antibióticos sea superior para los organismos invasores que para los animales o los seres humanos que los hospedan.


El término fue utilizado por primera vez por Selman Waksman en 1942 para describir ciertas «influencias antibióticas», es decir, aquellas formulaciones antagonistas al crecimiento de microorganismos y que son derivadas de otros organismos vivos. Esa definición, por ende, excluye a aquellas sustancias naturales, como el jugo gástrico, que pueden matar a un microorganismo, pero no es producido por otros microorganismos. En la actualidad la definición de un antibiótico está siendo usada para incluir a los antimicrobianos sintéticos o quimioterapéuticos antimicrobianos como las quinolonas, sulfamidas y otros agentes antimicrobianos derivados de productos naturales y aquellos con propiedades antibióticas descubiertas empíricamente.